Los sitios web y las aplicaciones forman parte de nuestro día a día. Estamos tan acostumbrados a su uso que a menudo pasamos por alto el trabajo que hay detrás de cada diseño web o característica de aplicación nueva: combinaciones de código y tecnología que los hace funcionar.
Tu trayectoria académica y profesional puede mejorar gracias a una beca. Con ella, puedes acceder a una formación en otro país y, también, llegar a conocer a personas de diferentes ámbitos. En resumen, nunca es mal momento para plantearse optar a una, porque siempre crecerás personal y profesionalmente gracias a esta experiencia.
En 1959, el estadounidense Richard Feynman, Premio Nobel de Física en 1965, afirmó que era posible fabricar dispositivos compuestos por unos pocos átomos. En particular, dijo que: “las leyes de la física no establecen ningún límite inferior para el tamaño de los artefactos que el ser humano puede construir”. Fue el primer paso hacia la nanotecnología.
El front-end developer se encarga de construir la parte visible y la experiencia de usuario de un sitio web, una aplicación, un sistema digital. Por lo tanto, trabaja en la interfaz pero no se limita a concebir la parte gráfica de un objeto digital. También estudia la mejor manera para que, por ejemplo, todo sea comprensible e intuitivo para el usuario en su experiencia en una web de eCommerce, desde el acceso a la pasarela de pago.