Tres estrategias para ayudar a los niños a desarrollar su capacidad de liderazgo

La capacidad de liderazgo se desarrolla desde niños. Conoce tres estrategias para ayudar a los más chicos a impulsar su pequeño líder.-

Las actividades en grupo, donde se deben respetar las ideas y espacios de los demás, son ideales para formar niños líderes | Fuente: Universia.

¿Niños líderes? Si, efectivamente la capacidad de liderazgo se manifiesta desde la niñez; y si bien esta es una característica que algunos traen innatas, es también una habilidad que puede desarrollarse. Aprende como ayudar a los niños a desarrollar su capacidad de liderazgo.

Que los niños aprendan de liderazgo desde los primeros años es algo que los puede beneficiar a futuro. Por supuesto que no todos los pequeños tienen el mismo perfil, pero también es verdad que existen varios perfiles de líderes, aunque todos estos perfiles (hablando de liderazgo positivo) comparten la idea de trabajar unidos por un mismo objetivo.

Tres estrategias para ayudar a los niños a desarrollar su capacidad de liderazgo:

1 – Lo primero es el ejemplo.

Si el adulto de referencia del niño se comporta como un déspota, es probable que el niño asimile que esto está bien o es lo normal.

Lo primero es enseñar con el ejemplo, el que muchas veces es más tenido en cuenta que las propias palabras.

Sé un ejemplo positivo demostrándoles a los pequeños que contigo se puede contar, que siempre estás dispuesto a tender una mano y que por más que dudas, te animas a tomar riesgos.

2 – Enséñale la importancia del trabajo en grupo.

Trabajar en grupo y a respetar las opiniones de todos es una de las características con las que deben contar los líderes.

Fomenta este tipo de actividades grupales a través de juegos, “brigadas de ayuda” (como por ejemplo a los animales o al cuidado de la naturaleza) u otro tipo de eventos que requieran trabajar con otros, respetar sus ideas y manejar la frustración cuando las cosas no salen como el niño esperaba.

3 – Enséñale sobre responsabilidad y ayúdale a ver lo positivo en las situaciones adversas.

Que las cosas no salgan exactamente como el niño imaginó no debería significar una “derrota” total”. Ayúdale a que entienda que de las situaciones más adversas se obtiene una enseñanza.

A la misma vez puedes enseñarle acerca de la importancia que tienen el esfuerzo y la responsabilidad para cumplir con lo que se propone.

Y si ha dado lo mejor de sí y las cosas no le salen como se había imaginado, explícale que “todavía” no lo logró, pero que si sigue intentando en el futuro lo va a conseguir.

Autora: Camila Siqueira.

Sitio Fuente: Universia México