7 trucos mentales para que la gente haga lo que quieres

El poder de persuasión es una habilidad esencial para cualquier persona que tenga a cargo un equipo, especialmente para líderes, emprendedores y docentes.-

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Los seres humanos somos criaturas de costumbre, condición que permite que muchos de nuestros patrones de conducta se puedan medir para luego utilizar esta información con diversos fines; de acuerdo a especialistas en psicología de la Universidad de Harvard.

Sabiendo esto, los datos nos aportan conocimiento para poder comprender mejor a quienes nos rodean y aprender a relacionarnos con ellos, cuestión que resulta fundamental si solemos trabajar en equipo o en nuestro día a día necesitamos influir en los otros para llegar cumplir objetivos más generales. Si bien no es sencillo influenciar en las opiniones o acciones del resto, está demostrado que algunos trucos mentales son útiles para que la gente haga lo que quieres.

Si bien cada individuo es dueño de su propia opinión, algunas personas han sabido cómo utilizar estos datos para que quienes los rodean hagan lo que ellos quieren. Si tienes ganas de probar hasta dónde es capaz de llegar tu poder de persuasión, te compartimos algunos trucos mentales eficaces.

7 trucos mentales para que la gente haga lo que quieres:

Repite tus opiniones.

No dudes en repetir lo que piensas cada vez que te sea posible; está comprobado que esta reiteración puede convencer al resto no sólo de que piense igual que tú, sino también de que defienda tus ideas como si fueran propias.

Imitar a quienes te rodean para generar empatía.

Cuando sentimos que quien está a nuestro lado es similar a nosotros, se despierta una gran empatía. Esta emoción hace que tengamos más inclinación a auxiliar o apoyar a esa persona que se nos parecen, que a otros individuos con quienes no tenemos tanta conexión.

Usar afirmaciones que no dejen lugar a la duda.

Si quieres convencer a alguien debes ser tajante. Por ejemplo, en lugar de “no puedo hacerlo” es preferible optar por “no lo hago”; esta última afirmación es una decisión tomada, mientras que la primera deja espacio a la duda, por lo que podría no ser efectiva para persuadir.

Justifícate con argumentos de peso.

Si al momento de expresar tu opinión, hacer un pedido o negarte a algo, no das ningún tipo de razón que explique esta postura, probablemente la persona que tienes delante no se lo tome tan en serio como si le brindas los argumentos que justifican tal decisión.

Intenta que tus argumentos incluyan a la mayoría.

Está comprobado que si se quiere convencer a alguien de algo, nada más efectivo que recurrir a argumentos como: “todo el mundo lo sabe”, “la mayoría en la oficina piensa” o “está comprobado por estudios”.

Usa la reciprocidad como estrategia a futuro.

Puede que no le encuentres valor al principio, pero ser reciproco con quienes te rodean puede ser una buena estrategia de persuasión. Todo compañero o persona sentirá que está en deuda contigo luego de que tú le hagas un favor, sin importar que tan grande o pequeño sea éste.

Debes parecer seguro de lo que dices.

Estar seguro es la mejor forma de demostrar al resto que de verdad crees en lo que estás diciendo. Por ello, aunque no tengas idea del tema en juego, será mejor que te muestres seguro y con argumentos de peso para defender tu postura.

Sitio Fuente: Universia México