Campos eléctricos para combatir una forma grave de cáncer
CIENCIAS DE LA SALUD Y TECNOLOGÍA.
Se ha dado un paso más en el desarrollo de una terapia que modula y aplica campos eléctricos directamente a los tumores cancerosos para detener su crecimiento y para enviar señales al sistema inmunológico del cuerpo para que ataque a las células cancerosas.
Aparato empleado para la terapia eléctrica probada en los experimentos de este estudio. Imagen: Usada con permiso de Novocure GmbH.
Un equipo encabezado por Dongjiang Chen, de la Universidad del Sur de California (USC) en Estados Unidos ha llegado a la conclusión de que un dispositivo para administrar campos eléctricos colocado sobre el cuero cabelludo, junto con inmunoterapia y quimioterapia, puede ayudar a los pacientes con glioblastoma a vivir más tiempo, particularmente en aquellos casos de tumores grandes e inoperables.
El glioblastoma es un tumor cerebral con pocos tratamientos eficaces disponibles. Según algunas estimaciones estadísticas, la supervivencia media de los pacientes recién diagnosticados de glioblastoma es de ocho meses.
En el nuevo estudio, se ha constatado que el uso de la versión disponible de esta terapia a base de campos eléctricos puede alargar la supervivencia de pacientes con glioblastoma, cuando se combina con inmunoterapia (pembrolizumab) y quimioterapia (temozolomida).
La terapia eléctrica entorpece el crecimiento tumoral mediante campos eléctricos cambiantes de baja intensidad que empujan o atraen, en direcciones continuamente cambiantes, estructuras clave dentro de las células tumorales. Esto dificulta su multiplicación. Impedir el crecimiento tumoral ofrece a los pacientes una mayor probabilidad de combatir el cáncer con éxito.
Cuando se utiliza para tratar el glioblastoma, esta terapia experimental aplica los campos eléctricos a través de un conjunto de electrodos en malla colocados estratégicamente sobre el cuero cabelludo. Los campos se generan con una frecuencia e intensidad precisas y se enfocan en el tumor. Los pacientes usan los electrodos durante aproximadamente 18 horas al día.
Los investigadores observaron que la terapia eléctrica atrae al punto de aplicación linfocitos T capaces de combatir a los tumores. Los linfocitos T son glóbulos blancos que identifican y atacan las células cancerosas, dentro del glioblastoma y en su vecindario inmediato. Cuando la nueva terapia eléctrica se complementa con inmunoterapia, estos linfocitos T permanecen activos durante más tiempo y son reemplazados por linfocitos T que luchan contra los tumores con una eficacia todavía mayor.
En las pruebas, la suma de terapia eléctrica, inmunoterapia y quimioterapia se asoció con un aumento del 70% en la supervivencia general.
El estudio se titula “Efficacy and safety of adjuvant TTFields plus pembrolizumab and temozolomide in newly diagnosed glioblastoma: A phase 2 study”. Y se ha publicado en la revista académica Med.
Por: Redacción.
Sitio Fuente: NCYT de Amazings