Lista de espera de la universidad: ¿qué hago en este momento?

-

Una vez terminados tus estudios previos, toca plantearse la preinscripción para conseguir plaza en la universidad donde quieres estudiar la carrera. Puede suceder que tu primera opción no se resuelva a tu favor, y que tengas que quedarte en la lista de espera. Te contamos qué hacer.

Saber que estás en la lista de espera para estudiar lo que te apasiona puede ser una decepción. Sin embargo, no es el fin del mundo. Que puedas terminar entrando en la carrera que quieres, depende de tu nota media, pero también de cómo rellenes la preinscripción que haces una vez superada la EBAU, por ejemplo.

La preinscripción universitaria es una lista que rellenas con los estudios de las universidades públicas a los que quieres acceder. Tienes hasta 12 huecos que rellenar por orden de preferencia, es decir, el primer puesto de la lista será la carrera que quieres en primer lugar, y así con todas.

Aunque haya 12 huecos, no es necesario rellenarlos todos. Eso sí, cuantos más rellenes, más posibilidades tendrás de ser admitido en alguna de tus elecciones, pero por eso mismo debes de colocarlas en estricto orden de tu preferencia, por si acaso terminas en la lista de espera de la universidad.

¿Qué es y cómo funciona la lista de espera de la Universidad?

Vamos a ver qué es y cómo funciona la lista de espera de la Universidad con un ejemplo. Imagina que te han admitido en la quinta elección de tu preinscripción. Eso significa que estarás en lista de espera para las cinco elecciones que van antes, por orden de prioridad. ¿Qué haces? Puedes quedarte con la carrera para la que te han dado una plaza, o esperar.

Como es lógico, las elecciones que van antes de la quinta que te han asignado tienen más importancia para ti. De hecho, puede que solo quieras estudiar, realmente, la primera opción, mientras que las otras serán para ti una especie de «premio de consolación».

Por tanto, en este momento estás en lista de espera en todos los grados a los que no has accedido, y que se encuentran por encima de la carrera en la que has obtenido la plaza. En el resto de tus elecciones no entrarás en la lista de espera, así que quedarán descartados ya para siempre. Por eso es importante pensarse muy bien cada una de las elecciones, y colocarlas en el orden correcto.

Para comprobar esa lista de espera debes ir consultando una a una cada página web de cada Universidad y facultad, para así saber si ya estás en la lista de espera de manera automática, o si, por ejemplo, debes confirmar tu interés en estar en una lista de espera en concreto. Esto es importante, porque si se trata el segundo caso y te pasas de plazo, perderás toda opción de entrar.

Por lo demás, la lista de espera está ordenada por nota media, por tanto, tu puesto dependerá de dicho dato. Puedes ir consultando los cambios en la lista a través de la página web de la universidad. Poco a poco, con suerte, la lista irá corriendo y tú podrás pasar a estudiar la carrera que preferías en primer lugar.

¿Qué hacer cuando estás en la lista de espera de la Universidad?

Vale, ahora que estás en la lista de espera de la universidad a la que deseas ingresar, ¿qué puedes hacer? Hay una serie de cosas que podrías tener en cuenta en tu situación:

- Confirma rápido que quieres mantenerte en la lista de espera. Es la opción si realmente no quieres.
- Infórmate llamando a la oficina de admisión, o equivalente, para saber tu puesto (si no lo sabes ya), pero aprovecha además para preguntar cuántas personas aceptaron de la lista de espera del año anterior. Así, puedes hacerte una idea de las posibilidades que tienes (y, en caso de ver que son pocas, optar por otra posibilidad).
- No ignores tus otras opciones, ¿estarías contento si tu decisión te llevase a otra carrera diferente? En caso afirmativo, no dudes más e informa a la universidad que te puso en la lista de espera que renuncias.
- Si estás en lista de espera para tu primera opción, pero te han admitido en otra, lo más frecuente es hacer una reserva de matrícula en la opción en la que te han admitido, por si acaso. Es decir, que, si finalmente no te admitiesen en tu primera opción, tendrías asegurado no perder el curso.
- En el caso de la universidad privada, la cosa puede ser muy diferente. En este caso podrías intentar obtener una recomendación, escribir una carta de presentación destacando tus motivaciones, tus logros académicos y explicando por qué deberían considerar admitirte en su universidad. En muchos casos, en las universidades privadas, la lista de espera no está ordenada.

Sitio Fuente: Universia México