60 niños muertos y más de 400 heridos en la última escalada en la franja de Gaza

UNICEF / DERECHOS HUMANOS.-

El millón de niños en Gaza sufre las crecientes consecuencias del conflicto violento sin tener ningún lugar seguro al que acudir. Se han perdido vidas y se han destrozado familias.

En Gaza, al menos 60 niños han muerto y otros 444 han resultado heridos en menos de 10 días. Casi 30.000 niños han sido desplazados. Se calcula que 250.000 niños necesitan servicios de salud mental y protección. Al menos cuatro instalaciones sanitarias y 40 escuelas han resultado dañadas. Unas 48 escuelas - la mayoría de ellas gestionadas por la UNRWA - están siendo utilizadas como refugios de emergencia para las familias que buscan refugio de la violencia.

Los ya debilitados sistemas de agua y saneamiento se han visto aún más comprometidos como resultado de esta última escalada. Las infraestructuras esenciales - incluyendo los pozos y depósitos de agua subterránea, las plantas de desalinización y de aguas residuales, las redes de suministro de agua y las estaciones de bombeo - han sufrido daños significativos. Calculamos que 325.000 personas necesitan servicios de agua y saneamiento de emergencia, sin los cuales tienen más probabilidades de contraer enfermedades infecciosas potencialmente mortales.

La producción de electricidad en toda Gaza ha disminuido aproximadamente un 60%, lo que hace que los hospitales dependan cada vez más de generadores para prestar servicios sanitarios esenciales. Estos generadores requieren importantes cantidades de combustible para funcionar. Cualquier reducción de la capacidad de atención sanitaria también podría poner en peligro el tratamiento de los enfermos de COVID-19.

Niños palestinos, heridos y detenidos en Jerusalén Este.

Los terribles sucesos de los últimos días se dieron tras semanas de recrudecimiento del conflicto en la zona. En las últimas semanas, 29 niños palestinos resultaron heridos en Jerusalén Este, incluidos en los barrios de la Ciudad Vieja y Sheikh Jarrah y ocho niños palestinos fueron arrestados.

Un bebé de un año estaba entre los heridos. Algunos niños fueron llevados al hospital con heridas en la cabeza y en la columna y algunos informes apuntan a que cerca de 300 personas resultaron heridas en la zona.

Desde UNICEF, recibimos noticias de que se impidió a las ambulancias llegar a la zona para asistir y evacuar a los heridos, y que un centro de salud fue alcanzado y registrado.

Las violaciones contra los niños deben terminar.

Todos los niños deben ser protegidos frente a la violencia y quedar fuera de peligro en todo momento. El derecho de las familias a acceder a cualquier sitio de culto debe preservarse, y los heridos tienen derecho a recibir asistencia sin restricciones.

Desde UNICEF pedimos el cese inmediato de las hostilidades por motivos humanitarios para permitir la entrada de personal y suministros esenciales, como combustible, artículos médicos, botiquines de primeros auxilios y vacunas contra el COVID-19. También pedimos que se establezcan corredores humanitarios para poder entregar estos suministros de forma segura, para que las familias puedan reunirse y acceder a los servicios esenciales, y para que los enfermos o heridos puedan ser evacuados.

Todos y cada uno de los días que continúe el conflicto, los niños de todo el Estado de Palestina e Israel sufrirán. Estos niños necesitan un alto el fuego ahora, así como una solución política a largo plazo para el conflicto más amplio. Se merecen algo mucho mejor que este horrible ciclo de violencia y miedo que dura ya demasiado tiempo.

El conflicto tiene un impacto profundo y duradero en los niños, independientemente de dónde vivan. Un niño es un niño. Esto ha estado sucediendo durante demasiado tiempo. Todas las partes deben poner fin a las violaciones contra los niños dondequiera que estén y en todo momento.

Sitio Fuente: UNICEF