El papel de Júpiter en la formación de la Tierra

ASTROFÍSICA.-

Un nuevo estudio ha revelado que al formarse Júpiter no solo creció hasta convertirse en el planeta de mayor masa del sistema solar sino que además sentó las bases de la arquitectura de la zona interior del sistema solar. Sin Júpiter, quizá no tendríamos la Tierra tal como la conocemos.

Júpiter y la Tierra. Fotos: NASA

Esta investigación la han realizado Baibhav Srivastava y André Izidoro, de la Universidad Rice en Houston, Texas, Estados Unidos.

Júpiter remodeló el sistema solar primitivo de forma drástica, creando anillos y huecos en el disco de materia del que se formaban astros, de tal manera que ello podría explicar un aparente y enigmático desajuste en la cronología de la formación de cuerpos sólidos de nuestro sistema solar.

Mediante simulaciones informáticas de última generación, Srivastava e Izidoro descubrieron que el rápido crecimiento inicial de Júpiter desestabilizó el disco de gas y polvo que rodeaba al Sol. La inmensa gravedad del planeta generó “arrugas” en el disco, creando “atascos cósmicos” que impidieron que muchas partículas pequeñas se precipitaran hacia el Sol. En vez de eso, estas partículas se acumularon en densas bandas donde pudieron agruparse formando planetesimales: las semillas rocosas de los planetas.

Lo sorprendente es que los planetesimales formados en estas bandas no fueron los componentes originales del sistema solar, sino que constituyen una segunda generación, nacida más tarde en la historia del sistema solar. Su nacimiento coincide con el de muchas condritas, una familia de meteoritos pétreos que conservan pistas químicas y de otros tipos sobre los inicios del sistema solar.

Las condritas son como cápsulas del tiempo de los albores del sistema solar. Un gran misterio ha venido acompañándolas: ¿Por qué algunos de estos meteoritos se formaron tan tarde, entre dos y tres millones de años después de los primeros cuerpos sólidos? Los resultados del nuevo estudio indican que el propio Júpiter creó las condiciones para su formación tardía.

En definitiva, Júpiter creó nuevas regiones donde los planetesimales pudieron formarse mucho más tarde.

Lo descubierto en el estudio también ayuda a explicar otro misterio del sistema solar: ¿Por qué la Tierra, Venus y Marte se han mantenido en la región orbital en la que están agrupados en vez de acercarse cada vez más al Sol hasta órbitas muy cercanas a él como ocurre en muchos sistemas planetarios de otras estrellas?

La explicación que resuelve el enigma es que Júpiter impidió esa migración de planetas en dirección al Sol.

El estudio se titula “The late formation of chondrites as a consequence of Jupiter-induced gaps and rings”. Y se ha publicado en la revista académica Science Advances.

Por: Redacción.

Sitio Fuente: NCYT de Amazings