Firman en la UNAM compromiso nacional para fortalecer la Cultura de paz y la no violencia en espacios educativos
UNAM.
- Declaración conjunta, al término de la Semana Nacional de Cultura de Paz en la UNAM, iniciativa impulsada por el rector Leonardo Lomelí
- Semilleros Universitarios por la Paz: red para transformar el país desde la educación
- Reafirman la urgencia de consolidar entornos más seguros, inclusivos y respetuosos de los derechos humanos.
En la Universidad Nacional Autónoma de México, representantes de universidades e instituciones de educación superior del país, de gobierno, académicas, académicos e integrantes de la sociedad civil, suscribieron una Declaración conjunta para fortalecer el compromiso nacional con la promoción de una Cultura de paz y la erradicación de las violencias en todos los espacios educativos.
Al término de los trabajos de la Primera Semana Nacional de Cultura de Paz, iniciativa impulsada por el rector Leonardo Lomelí y bajo el lema “Semilleros Universitarios por la Paz”, el pronunciamiento reafirma la urgencia de consolidar entornos más seguros, inclusivos y respetuosos de los derechos humanos, colocando en el centro a las infancias, adolescencias y juventudes como actores clave en la transformación del tejido social.
Entre los acuerdos destacan la adopción de los principios contenidos en la Recomendación sobre la Educación para la Paz, los Derechos Humanos y el Desarrollo Sostenible, aprobada por la UNESCO en noviembre de 2023, que promueve un enfoque educativo integral centrado en: la empatía, el pensamiento crítico y la comprensión intercultural, una visión activa de la paz basada en la justicia, la dignidad y la colaboración, la ciudadanía global, la solidaridad y el respeto a la diversidad, a la alfabetización mediática e informacional como herramientas contra la desinformación y el discurso de odio.
Asimismo, las instituciones firmantes se comprometieron a implementar acciones estratégicas como la formación especializada en mediación y resolución pacífica de conflictos para docentes y estudiantes; creación de una Red Internacional de Investigación en Cultura de Paz; movilidad académica internacional en temas de paz y justicia social; crear un repositorio compartido de acceso abierto con investigaciones y recursos educativos sobre la paz; Laboratorio Nacional de Mediación y Resolución de Conflictos, con brigadas universitarias en colaboración con comunidades afectadas por las violencias; y conformar campañas de comunicación digital con enfoque en alfabetización crítica, empatía y visibilización de juventudes constructoras de paz.
Por una agenda transformadora y abierta.
La Declaratoria subraya además que no se puede normalizar el dolor ni la violencia estructural. Por ello, las instituciones firmantes cierran filas “desde la educación, el pensamiento crítico y la acción colectiva”, comprometidas con un modelo formativo que integre transversalmente el diálogo, la perspectiva de género, la inclusión social y el respeto irrestricto a los derechos humanos.
“La paz no es un discurso, es una práctica cotidiana que debe enseñarse, vivirse y defenderse”, señala el documento, destacando a niñas, niños, adolescentes y jóvenes como protagonistas activos de un nuevo pacto social.
Convocatoria abierta a sumar voluntades.
Finalmente, el llamado es a sumar a la comunidad académica, gobiernos locales y nacionales, organizaciones de la sociedad civil y aliados internacionales para consolidar una agenda educativa transformadora que coloque la Cultura de paz como eje transversal en la construcción de un país más justo, solidario y sostenible.
Entre más de medio centenar de firmantes destacan: el rector Leonardo Lomelí; la premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú; Francisco Javier Gorjón, coordinador general de la Red Nacional para la Paz de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES); Nashieli Ramírez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México; Francisco Jiménez Bautista, académico de la Universidad de Granada; el jurista Diego Valadés; el embajador Joel Hernández, de la cancillería y del Instituto Matías Romero.
También Francisco Javier Lozano, de la Universidad de Guadalajara; Marta Alicia Tronco, del Instituto Politécnico Nacional; Luis Raúl González Pérez, expresidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; y Mario Luis Fuentes Alcalá, coordinador del Seminario de Altos Estudios del Desarrollo de la UNAM.
Además, Leticia Cano, directora del Programa Universitario de Cultura de Paz y Erradicación de las Violencias; Mónica González Contró, directora del Instituto de Investigaciones Jurídicas; Miguel Álvarez Gándara, de SERAPAZ; el presbítero Mario Ángel Flores, de la Conferencia del Episcopado Mexicano; las activistas Olimpia Coral Melo, Mariclaire Acosta, Eufrosina Cruz, Tania Ramírez, de la Red de los Derechos de la Infancia; y Gemma Santana, de Sélvame MX, entre muchas otras y otros participantes.
Sitio Fuente: Boletín UNAM-DGCS-639