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La Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia regresa con una programación para todos los públicos

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- Hasta el  7 de octubre se llevarán a cabo 119 presentaciones editoriales, seis coloquios académicos, tres mesas redondas y 34 actividades artísticas
- Nueve obras merecieron el galardón “Antonio García Cubas”, en sus respectivas categorías, y otras diez obtuvieron mención honorífica.

Marina Núñez Bespalova, directora general de publicaciones de la Secretaría de Cultura; Ricardo Aguirre, en representación de José Crespo Fernández, embajador de Bolivia en México; Cristina Rodríguez de Tello, presidenta del DIF de Zacatecas; Alejandro Tello, gobernador de Zacatecas; Diego Prieto Hernández, director general del INAH; Adriana Konzevik Cabib, coordinadora Nacional de Difusión del INAH, y Antonio Saborit, director del Museo Nacional de Antropología. Foto: Héctor Montaño, INAH.

Luego de un año de espera ante la emergencia de los sismos de septiembre de 2017, y al paso de los matlachines, danza que concentra la historia de Zacatecas, abrió la XXIX Feria Internacional del Libro de Antropología e Historia (FILAH), la más importante en su tipo en Latinoamérica, con un programa variado y extenso que espera atraer a propios y extraños al Museo Nacional de Antropología.

Diego Prieto Hernández, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y Alejandro Tello Cristerna, gobernador de Zacatecas —estado invitado—, inauguraron la FILAH, que en esta edición reúne en el patio del museo a 64 editoriales. Hasta el domingo 7 de octubre, en distintos espacios del recinto se llevarán a cabo 119 presentaciones editoriales, seis coloquios académicos, tres mesas redondas y 34 actividades artísticas.

En representación de José Crespo Fernández, embajador de Bolivia en México, asistió el cónsul Ricardo Aguirre Olmos, quien detalló la programación preparada por el país invitado de honor, ejemplo de ello, será la presentación de los primeros 30 títulos de la Biblioteca del Bicentenario de Bolivia, un magno proyecto que prevé reunir los 200 libros fundamentales de la historia de la nación sudamericana, en 2025, en el marco del bicentenario de su independencia.

El titular del INAH, el antropólogo Diego Prieto, dijo que la FILAH desde su creación se ha adaptado a los cambios del país, de la industria editorial y de la academia, sin abandonar su condición de feria especializada, constituyéndose como espacio idóneo para el diálogo entre autores y lectores. Bajo esta lógica, Bolivia y Zacatecas representan territorios de profundas raíces históricas y culturales, riqueza que mostrarán en la feria a través de su producción editorial, artesanías y expresiones artísticas.

Expresó que Zacatecas, llamada antaño “La civilizadora del norte”, ha ido poniendo en valor su patrimonio de manera continua; a su capital declarada Patrimonio Mundial, se han sumado diversos municipios que ahora están dentro del programa Pueblos Mágicos, y próximamente a las zonas arqueológicas de La Quemada y Alta Vista, se sumará el Cerro del Teúl.

Alejandro Tello Cristerna, gobernador de Zacatecas, dio a conocer que este sitio prehispánico ubicado en Teúl de González Ortega, al sur del estado, abrirá al público el próximo 5 de octubre. Se trata de un espacio que fue ocupado a lo largo de 1,800 años, desde los inicios de nuestra era, hasta los siglos XV y XVI, cuando estuvo habitado por los caxcanes, sin embargo, su apogeo se dio entre 900 y 1300 d.C., cuando interactuó intensamente con las sociedades de la costa del Pacífico.

En la 19° edición de la FILAH se suman dos coloquios, uno de ellos está dedicado a la Conservación del Patrimonio Cultural, y otro, a La evangelización novohispana. Rupturas y Supervivencias. Destacan además las exposiciones fotográficas Bolivia. Corazón del sur, y una más: Las imágenes de las palabras, compuesta por retratos de connotados escritores, autoría del fotógrafo zacatecano Pedro Valtierra.

Sobresalen las experiencias que compartirán destacados académicos alrededor de los 80 años de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y su participación, a cinco décadas de distancia, en el movimiento estudiantil de 1968. Entre las novedades editoriales del INAH, el director general del INAH subrayó el título Las culturas indígenas de México. Atlas Nacional de Etnografía, llamado a ser un referente en la materia.

Complementan el programa de la feria una muestra de cine documental antropológico e histórico, integrada por 21 títulos, así como 34 actividades artísticas de música, danza y teatro, aparte de 36 talleres para niños y jóvenes apoyados por el Programa Alas y Raíces a los niños de la Secretaría de Cultura y el Área de Servicios Educativos del MNA, de serigrafía, cerámica, conservación arqueológica, telar de cintura, lengua náhuatl, entre muchos más.

La inauguración de la XXIX FILAH estuvo presidida también por Cristina Rodríguez de Tello, presidenta del DIF de Zacatecas; Marina Núñez Bespalova, directora general de publicaciones de la Secretaría de Cultura; Antonio Saborit, director del Museo Nacional de Antropología; y Adriana Konzevik Cabib, coordinadora nacional de Difusión del INAH, instancia organizadora del evento.  

Entrega de los Premios Antonio García Cubas.

Como es tradición, en el marco de comienzo de la FILAH, se hizo entrega del Premio Antonio García Cubas, que reconoce en nueve categorías la labor editorial en los rubros de la antropología y la historia a nivel nacional. El encargado de mencionar a los premiados fue Carlos Rosique Anaya Rosique, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana y del jurado del premio.

Nueve obras merecieron galardón y otras diez obtuvieron mención honorífica, en los rubros Obra Científica, Obra de Divulgación, Novela Histórica, Obra Infantil, Obra Juvenil, Libro de Texto Escolar, Libro de Arte, Catálogo y Edición Facsimilar.

En Obra Científica, el premio lo obtuvo el libro Eclipse de siete lunas. Mujeres muralistas en México, editado por Artes de México. La mención honorífica fue para Ernesto de la Torre Villar, 1917–2009. Textos imprescindibles.

En la categoría Obra de Divulgación, el galardón correspondió a Alejandro Ruiz. Cocina de Oaxaca, de Sicomodo Ediciones SA de CV. Las menciones en dicho rubro fueron para ¡Lotería! Un mundo de imágenes. Las loterías de figuras en Campeche y México; Bienes comunes: 150 años de la Biblioteca Nacional de México en 150 objetos y Colección Chávez-Cedeño: Antonio Vanegas Arroyo. Un editor extraordinario.

Los huecos de la Memoria, de Raquel Martínez-Gómez López, editado por la Universidad Veracruzana, fue el título galardonado en la categoría Novela Histórica. La Obra Infantil distinguida fue Palabras en mi maleta, de Ediciones Castillo, mientras que el libro Los dos hermanos y Mexique. El hombre del barco, obtuvieron mención.

El premio en la categoría Obra Juvenil correspondió a Pakal. El gran rey maya de Palenque, editado por CIDCLI; la mención fue para El chilangoscopio de Javier Sáez Castán. Mientras que en Libro de Texto Escolar el galardón fue para  Ju je uantani. Manual para la enseñanza de la lengua p´urhepecha, editado por la UNAM/Laboratorio Nacional de Materiales Orales.

Este año, el premio en la categoría de Libro de Arte tocó al título Francisco Toledo. Obra 1990–2017, Tomo III, de Jorge Alberto Manrique (†) et al. y Francisco Toledo. Obra 1957–2017, Tomo IV, de María Cristina Torales Pacheco, et al., ambos editados por Fomento Cultural Banamex. Las menciones fueron para Fotografía Artística Guerra. Yucatán, México y 400 años de Cervantes en México.

El galardón como Mejor Catálogo lo obtuvo Híbridos. El cuerpo como imaginario, de Tatyana Franck, Valentine Lasseau, et al., publicado por la Secretaría de Cultura/INBA, mientras que Rojo mexicano. La grana cochinilla en el arte, también editado por la Secretaría de Cultura/ INBA, obtuvo mención.

La Edición Facsimilar premiada fue “Regimiento de la declinación del sol” del Virrey D. Antonio de Mendoza: la astronomía como instrumento en la exploración de los océanos durante el siglo XVI, editado por la UNAM/Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial.

Las editoriales de los libros galardonados recibieron un diploma, así como la adquisición de 50 mil pesos en obras de las casas editoriales, mismas que enriquecerán las bibliotecas del INAH.

Sitio Fuente: INAH