Efemérides 13 y 12 de septiembre
PRIMARIA
1812. Muere ejecutado por orden del virrey Francisco Xavier Venegas, el insurgente Leonardo Bravo.
1813. Instalación del Congreso de Chilpancingo.
1847. Aniversario del sacrificio de los Niños Héroes de Chapultepec. La Bandera Nacional deberá izarse a media asta.
1912. Muere en Madrid, España, Justo Sierra Méndez, escritor, historiador, periodista, poeta y político mexicano.
2004. Muere en la Ciudad de México, Luis Ernesto Miramontes Cárdenas, coinventor de la píldora anticonceptiva.
13 de septiembre Niños Héroes de Chapultepec.
Niños Héroes de Chapultepec. foto: biografíasyvidas
El 13 de mayo de 1846 los Estados Unidos declararon la guerra a México, con la intención de apoderarse de la Alta California, Nuevo México y otros territorios del norte del país.
El 8 de septiembre los invasores norteamericanos se apoderaron del Molino del Rey, para ir al último reducto militar mexicano en su camino a la Ciudad de México: el Castillo de Chapultepec, sede del Colegio Militar en el que se encontraban más de 50 cadetes.
La defensa del Castillo fue confiada al general Nicolás Bravo, antiguo insurgente; sin embargo, el general contaba con más de 800 soldados para defender la fortaleza contra los más de 7 mil soldados de Estados Unidos.
El general Bravo dio la orden que los cadetes menores de edad se retiraran, pero la mayoría no lo hizo. La madrugada del 12 de septiembre de 1847 las baterías estadunidenses iniciaron un intenso bombardeo sobre el Castillo, el efecto fue devastador.
Al amanecer del día 13 nuevamente bombardearon el Castillo pero a las nueve de la mañana el fuego cesó, y los soldados estadunidenses iniciaron el ascenso del cerro, por la parte oeste. La lucha se libró cuerpo a cuerpo, los mexicanos combatieron con fiereza pero los invasores ganaban terreno y lograron llegar al Castillo por el lado occidental.
Al llegar los norteamericanos al Castillo sólo unos cuantos soldados y cadetes permanecían en el edificio. La historia guarda memoria, muy en especial, de seis de ellos a quienes recordamos como los Niños Héroes : Juan Escutia, Vicente Suárez, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, Agustín Melgar y el teniente Juan de la Barrera, que ofrendarían su vida en el asalto estadunidense al Castillo de Chapultepec, el 13 de septiembre de 1847.
Fue el Presidente Benito Juárez el primero en honrar oficialmente la gesta de los Niños Héroes, al decretar el 13 de septiembre día de luto nacional, en memoria de los cadetes que murieron en el Castillo de Chapultepec.
Efemérides 12 de septiembre.
1847. Conmemoración de la gesta heroica del Batallón de San Patricio, en 1847. La Bandera Nacional deberá izarse
a media asta.
1896. Aparece el primer número del diario El Imparcial, obra del periodista Rafael Reyes Espíndola.
1919. Se funda la Academia Mexicana de la Historia, correspondiente de la Real de Madrid. Su primer director fue
Luis González Obregón
12 de septiembre de 1836, fundación de la Academia de la Historia.
En 1836 el gobierno de la República decretó la fundación de la primera Academia de la Historia, integrada por distinguidos intelectuales. No obstante, los vaivenes políticos impidieron que prosperara dicha iniciativa.
La consolidación de la soberanía en 1867 permitió emprender los proyectos educativos que la inestabilidad y las amenazas externas habían obstaculizado. Así, en la década de 1870, en casi toda Hispanoamérica se había conquistado cierta estabilidad política que permitía emprender tareas que habían quedado inconclusas o que no se habían consolidado. Es por ello que apareció un movimiento en la mayoría de los países hispanoamericanos para instituir academias de la lengua, correspondientes de la Real de Madrid, del cual resultaría la fundación de la Academia Mexicana de la Lengua en 1875.
Varios diplomáticos hispanoamericanos acreditados en Madrid iniciaron gestiones para crear las instituciones correspondientes de la Real Academia de la Historia de Madrid, pero que no lograron consolidar su objetivo por no encontrar eco en esa institución. En 1888 se volvió a replantear el asunto, y esta vez la Real Academia se mostró más receptiva; tanto, que se estudió y discutió el proyecto y hasta se redactó el reglamento por el que se regirían las academias afiliadas. De esta manera se establecieron las academias de Buenos Aires, Bogotá y Caracas; pero la fundación de la de México volvió a fracasar.
En 1901, por iniciativa del marqués de Prat, ministro de España en México, se hizo un nuevo intento; el proyecto parecía sólido y, después de varias reuniones, se procedió a elegir académicos fundadores y al secretario de la institución, don Nicolás León. No obstante, la nueva academia decayó sin ser reconocida por la matriz madrileña.
En 1916, cuando apenas se iba logrando la pacificación revolucionaria en el país, un nuevo proyecto surgía; apadrinado por redactores y colaboradores de la Revista de Revistas, se fundó la Academia de Historia. Uno de sus miembros, don Manuel Romero de Terreros, a punto de viajar a España, fue encargado de llevar un saludo a la Real Academia de Madrid, con la esperanza de que la Academia de Historia se convirtiera más tarde en su correspondiente.
La Real Academia de Madrid utilizó, para la Academia mexicana, el reglamento redactado en 1888 para las correspondientes en el resto de América y, de acuerdo con éste, el 12 de septiembre de 1919 surgió finalmente la Academia Mexicana de la Historia. Los primeros en ocupar algunos de los 24 sillones de número fueron: Francisco Sosa, Francisco Plancarte, Ignacio Montes de Oca, Luis García Pimentel, Francisco A. de Icaza, Mariano Cuevas, Manuel Romero de Terreros, Jesús García Gutiérrez, Jesús Galindo y Villa, Luis González Obregón, Juan B. Iguíniz y Genaro Estrada.
Uno de los principales problemas de la Academia fue que no contaba con ninguna sede ni fuentes permanentes de financiamiento. Sin embargo, gracias a la colaboración de don Atanasio G. Saravia, quien fue funcionario del Banco Nacional de México, se logró que esta institución proporcionara el financiamiento no sólo para construir el actual edificio que ocupa la Academia, sino para que adquiriera la portada de un palacio colonial "que ornaba la antigua calle de Capuchinas". El 9 de diciembre de 1953, en ceremonia solemne, la Academia estrenaba casa.
En sus primeros años la Academia pudo vivir gracias a diversos patronos y benefactores. Sin embargo, utilizado para publicar las Memorias de la Academia Mexicana de la Historia que aparecieron con gran puntualidad, el patrimonio se redujo por los altibajos de la economía mexicana y se empezó a recurrir a la Secretaría de Educación Pública, la cual le ha dado el sustento desde entonces.
El manejo austero de ese patrimonio durante la gestión de don Edmundo O'Gorman como director, permitió emprender la renovación de su edificio, con lo cual la sala de juntas y el auditorio adquirieron una apariencia acorde a su ilustre fachada.
Actualmente la Academia cuenta con 30 lugares de número; 22 para miembros residentes en la Ciudad de México y ocho para los estados. Comprende a historiadores de distintas especialidades —Historia política, eclesiástica, social, de la mujer, económica, del arte; Antropología, Arqueología e Historiografía, entre otras— y de diferentes épocas de estudios, como Historia prehispánica, colonial, del siglo XIX, de la Revolución y contemporánea.
Sitio Fuente: SEP