William Harvey: El pionero de la circulación sanguínea

HISTORIA DE LA CIENCIA.-

William Harvey, un médico y fisiólogo inglés del siglo XVII, es reconocido mundialmente por su revolucionario descubrimiento de la circulación de la sangre. Su trabajo transformó la comprensión de la fisiología humana y sentó las bases para la medicina moderna.

Foto: Wikimedia Commons.

Los Primeros Años de William Harvey.

William Harvey nació el 1 de abril de 1578 en Folkestone, Kent, Inglaterra. Proveniente de una familia acomodada, Harvey mostró un temprano interés por la ciencia y la medicina. A los 16 años, ingresó en el Gonville and Caius College de Cambridge, donde obtuvo su licenciatura en artes en 1597. Posteriormente, se trasladó a la Universidad de Padua en Italia, una de las instituciones médicas más prestigiosas de la época, donde estudió bajo la tutela de Hieronymus Fabricius, un renombrado anatomista.

El Descubrimiento de la Circulación de la Sangre.

Tras regresar a Inglaterra en 1602, Harvey comenzó a practicar la medicina en Londres. Fue nombrado médico del Hospital de San Bartolomé en 1609 y más tarde se convirtió en médico del rey Jacobo I y, posteriormente, de Carlos I. Durante este tiempo, Harvey realizó extensas investigaciones y experimentos que culminaron en su obra más influyente, “Exercitatio Anatomica de Motu Cordis et Sanguinis in Animalibus” (Ejercicio anatómico sobre el movimiento del corazón y la sangre en los animales), publicada en 1628.

En esta obra, Harvey presentó su teoría de la circulación sanguínea. Contrariamente a la creencia galénica de que la sangre se producía en el hígado y se consumía en los tejidos, Harvey demostró que la sangre circula continuamente por el cuerpo, impulsada por el bombeo del corazón. Utilizando experimentos meticulosos y observaciones detalladas, Harvey mostró cómo la sangre fluye en un circuito cerrado, pasando a través de las arterias y regresando al corazón por las venas.

Metodología y Experimentos.

La metodología de Harvey fue innovadora para su tiempo. Realizó experimentos en animales y disecciones humanas para observar el flujo sanguíneo y el funcionamiento del corazón. Sus experimentos incluyeron la ligadura de arterias y venas para demostrar la dirección del flujo sanguíneo y la medición del volumen de sangre bombeada por el corazón.

Uno de los experimentos más famosos de Harvey consistió en atar una vena en el brazo de una persona y observar cómo las venas se hinchaban por debajo del punto de ligadura, pero no por encima. Esto demostró que la sangre fluía en una sola dirección, hacia el corazón, desafiando la visión prevalente de la época.

Impacto y Legado.

El descubrimiento de Harvey fue inicialmente recibido con escepticismo, pero con el tiempo, su teoría fue aceptada y celebrada como una de las mayores contribuciones a la medicina. Su trabajo sentó las bases para el desarrollo de la fisiología moderna y la cardiología. La comprensión de la circulación sanguínea permitió avances en la cirugía, la medicina interna y la anatomía, revolucionando el tratamiento de enfermedades cardiovasculares y mejorando la atención médica.

Harvey continuó trabajando como médico y académico hasta su muerte en 1657. A pesar de las controversias iniciales, su obra perduró y su legado sigue vivo en la medicina contemporánea. El enfoque empírico y experimental de Harvey influyó profundamente en la metodología científica, inspirando a generaciones de médicos y científicos a basar sus conocimientos en la observación y la experimentación rigurosa.

Sitio Fuente: NCYT de Amazings