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¿Cómo formarte si quieres ser intérprete profesional? Principales salidas laborales

ORIENTACIÓN VOCACIONAL.-

Si tienes facilidad con los idiomas e interés en conocer más en profundidad tu lengua materna y otras nuevas, la interpretación puede ser una gran elección para tu formación y posterior futuro laboral. En este artículo encontrarás las claves sobre cómo formarte y qué salidas laborales tienes como intérprete profesional.

Los intérpretes son profesionales expertos de la comunicación y los idiomas. Su principal función es escuchar, entender y traducir discursos orales de un idioma a otro para facilitar el entendimiento entre personas o grupos de personas que no tienen una lengua en común.

Suelen ejercer sus funciones en conferencias, reuniones o discursos políticos, y su trabajo es a la par exigente y estresante, puesto que muchas veces han de realizarlo en tiempo real.

La labor de los intérpretes es de vital importancia al ser el nexo de unión entre diferentes culturas e individuos. Se trata de profesionales muy valorados en diferentes ámbitos, como el jurídico, el de la salud, el sector público, los medios de comunicación o las relaciones internacionales, entre otros.

Como profesional de la interpretación deberás especializarte en, al menos, dos idiomas (contando tu lengua materna), aunque es habitual encontrar profesionales especializados en tres o más lenguas. La fluidez y el conocimiento profundo de ellas es indispensable en esta profesión.

¿Cuál es la formación necesaria para trabajar como intérprete?

El Grado de Traducción e Interpretación es la vía más conveniente para formarse como intérprete profesional. No es la única manera, ya que es posible formarse en otra disciplina (ingeniería, derecho, medicina…) y cursar un Máster o un Curso de posgrado en traducción e interpretación.

Dependiendo del centro y su plan de estudios, el número de lenguas que manejarás puede variar. El objetivo de esta carrera es formar profesionales polivalentes capaces de procesar, analizar, transformar y transmitir información entre distintas lenguas con los medios técnicos a su alcance.

Normalmente, la formación en Traducción e Interpretación implica aprender una lengua A (la lengua materna del alumno), una lengua B y lengua C, siendo estas lenguas extranjeras. Entre las diferentes elecciones inglés, francés y alemán suelen ser las elecciones más comunes para la lengua B, mientras que para la lengua C hay un abanico más amplio que comprende, entre otras, árabe, italiano, ruso, chino o portugués.

Además del dominio teórico y práctico de las lenguas elegidas, la formación implica también el trabajo de la comprensión lectora, conocimientos de terminología, una sólida preparación en cuanto a la cultura asociada a las lenguas elegidas y otras habilidades como el conocimiento de las herramientas informáticas del sector o el código deontológico de la profesión.

Hay que explicar que, aunque el grado sea de traducción e interpretación, ambos profesionales tienen diferencias sustanciales en cuanto a las labores que realizan. La diferencia fundamental entre un traductor y un intérprete está en el tipo de mensaje que trabaja cada uno de ellos. La traducción es una tarea que se realiza principalmente por escrito, pero la interpretación se trabaja de manera oral.

Es decir, el intérprete se especializa en transmitir mensajes orales de una lengua a otra, ya sea en simultáneo o en diferido, se encargará de escuchar un idioma y transmitirlo oralmente o mediante lenguaje de signos a otro. Por tanto, debe ser un profesional muy adaptable, con gran capacidad de reacción y con una mente ágil.

Empleabilidad en el sector de la interpretación.

En un entorno global como el que vivimos, el Grado de Traducción e Interpretación ofrece la posibilidad de trabajar en un amplio espectro de puestos. Los egresados de estos estudios pueden ejercer su profesión de manera autónoma, a través de una agencia, o como empleados en las entidades o instituciones que necesiten de sus servicios.

De esta forma, se necesitan intérpretes profesionales en entidades y organizaciones gubernamentales, en agencias de traducción e interpretación, empresas privadas y medios de comunicación.

Hay muchas más salidas profesionales concretas para el profesional de la interpretación:

- Comercio exterior: en un mercado cada vez más global, las empresas que exportan sus productos a otros países necesitan de profesionales capacitados para comunicarse lo mejor posible en el idioma de sus clientes potenciales.
- En competiciones deportivas internacionales, en las que la gestión multilingüe es imprescindible para la organización de estas dada la variedad de culturas y lenguas diferentes que están involucradas.
- En multinacionales, sobre todo si nos referimos a las que operan con nuevas tecnologías e Internet, necesitan expertos en gestión del multilingüismo y la comunicación internacional.
- En eventos de carácter internacional, como conferencias, congresos, seminarios, jornadas o cualquier evento cultural.
- Intérpretes en conferencias, cumbres y congresos políticos, algo vital para mantener las buenas relaciones diplomáticas e internacionales.

Sitio Fuente: Universia México