10 tipos de docentes que te puedes encontrar en la universidad

Los profesores juegan un rol fundamental en la formación de los alumnos, pero no todos son iguales. Conoce 10 tipos de profesores que te vas a encontrar en la Universidad.

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Más allá de las materias que impartan, los perfiles de los profesores pueden ser muy distintos entre sí. Es lógico, ya que ante todo son personas y las personas se diferencian. Antes de que te quedes atónito frente a un docente por alguna actitud que no sabes cómo sortear, lee esta guía donde veremos 10 perfiles de profesores que te puedes encontrar en la universidad. ¡A ver si reconoces alguno!

1 - El erudito.

Este profesor no se limita a su rol docente en su carrera profesional, sino que es además autor de varios libros que todos usarán como referencia (porque, además, el será su mejor director de marketing promocionando sus propios textos como fuentes de consulta). Si no lees sus libros, puedes quedar completamente por fuera de su asignatura; ya que gran parte del curso puede girar en torno a su obra. Un consejo prudente para estos casos, es que no le lleves jamás una fotocopia de sus textos. ¿Por qué? Y bueno, justamente, porque parte de su vida se la gana gracias a los derechos de autor que generan sus publicaciones.

2 - El que te despierta las ganas de sestear.

Algunos profesores saben cómo motivar a sus alumnos y mantenerlos atentos toda la clase. Pero esos no son precisamente los que se incluyen en este punto. Los profesores “aburridos” pueden hacer del tema más maravilloso un preludio de la siesta. Su voz es pausada, su tono es bajo, no utiliza recursos actuales y sus libros parece haberlos heredado de Cristóbal Colón. Con este tipo de profesores, solo piensas en que llegue el momento de dormir después de estudiar.

¿Qué hacer? Y bueno, te sugerimos que busques por tu cuenta recursos interactivos para motivarte en el estudio de la asignatura; los que además, con toda sutileza, le puedes mostrar y proponer incluir en las lecciones.

3 - Los que no se discute lo que dice el libro.

Estos profesores tienen sus textos marcados dentro del programa de estudio y nada con venir con conceptos obtenidos por otra fuente. Los textos que les marca el programa son palabra santa, y ellos no están dispuestos a incluir otras versiones ni puntos de vista. Si lo que quieres es solamente salvar la materia, pues estudia de los libros que él recomienda y listo. Pero también es válido que defiendas otras ideas o autores si así lo crees pertinente. Eso sí: si vas a discrepar con el docente, más vale que tengas argumentos muy válidos.

4 - El simpático.

La simpatía y empatía son dos características muy positivas; y hay quienes se ganan a sus alumnos fomentando la “buena onda” dentro de los límites aceptables entre profesor y alumno. Cuando el docente sabe ser simpático pero a la vez marcando los límites, se hace querer por todos los alumnos y logra que éstos se motiven mucho más que bajo el mando de  un profesor rígido.

5 - El rígido.

Con estos profesores o estudias, o no salvarás jamás su materia. Aquellos estudiantes que van a clases y a las pruebas y exámenes “por si las dudas” no tendrán ni una chance remota de exonerar la asignatura. Es más, si quieres una nota aceptable, no solo tendrás que estudiar; sino que deberás estudiar el doble o más que para el resto de los cursos y entender a fondo los temas que está dando el profesor, ya que no querrá que los sepas de memoria sino que los analices y comprendas en profundidad (y esto te lo demostrará de forma clara en las preguntas que hará sobre lo aprendido).

6 - El del siglo pasado.

Tienen algún grado de parentesco con los profesores que despiertan las ganas de sestear; pero su mal radica en que no se han actualizado en nada en cuanto a TICs. A lo sumo te presentarán un aburrido PowerPoint, pero no irán más allá de eso con sus conocimientos de tecnología.

Además, los profesores antiguos siguen escribiendo sobre una pizarra, ya que como destacamos todavía no se ha puesto al tanto de que vivimos en una “era online”. Y es probable que no se entere jamás, así que lo mejor que puedes hacer es entrenar tu mano para tomar apuntes.

7 - El Steve Jobs.

Está en la otra vereda delo profesor del siglo pasado. El docente Steve Jobs será una exquisita fuente de tips sobre los últimos recursos educativos asociados a la tecnología. En sus clases te llenará de videos, podcasts educativos, recomendaciones sobre Moocs, y todas las novedades  y tendencias educativas que surjan a nivel tecnológico porque saben perfectamente que la tecnología es una aliada en la educación.

Claro está que si te toca hacer una presentación en la materia de este profesor, no se te ocurra aparecer con un PowerPoint descolorido y vetusto.

8 - El profesor enciclopedia.

¿Conoces el juego del Trivial? Es un juego de mesa que tiene miles de preguntas sobre los temas más diversos. El profesor enciclopedia tendrá todas las respuestas sobre el tema que se te ocurra preguntarle. Habrá los que sean muy generosos compartiendo la información, y habrá de los que se pondrán de mal humor si cada duda que tienes se la consultas a él. Detecta que tipo de “profesor enciclopedia” te ha tocado para saber cómo conducirte con él.

9 - El holgazán.

Sí, también hay de esos profesores que prefieren hacer cualquier cosa durante la clase menos dar los temas que están pautados en el programa de estudios. Cuando está en clase, seguramente la hora se le vaya en cuentos y anécdotas (pero no precisamente sobre el material de estudio); y cuando no, pues bueno andará en congresos y conferencias por ahí, dejando un suplente a que no le podrá indicar ni en qué parte del curso quedó la última vez.

10 - El que hace que te enamores de la materia.

Estos son los mejores. No importa que materia sea que esté impartiendo y si es o no de tu agrado, los profesores que saben cómo motivar a sus alumnos hará que te intereses en su asignatura y que quieras estudiar siempre para sus clases. Además, implementan nuevas tendencias en el aula, ofrecen feedback constante, te guían en el camino de la profesión, comparten sus conocimientos sobre el campo laboral sin egoísmo alguno ni celos de su carrera, y estarán dispuestos a explicarte algo las veces necesarias y mediante diferentes recursos hasta que lo entiendas. A estos docentes debemos todo el agradecimiento; y su recompensa es saber que sus alumnos los recordarán el resto de su vida como a alguien que supo sabiamente mostrarles el camino.

Sitio Fuente: Universia México