En Ciencia Joven: ¡Qué le pasa a mi cuerpo! La inquietud de los adolescentes
MUNDO JOVEN.
Los cambios físicos y emocionales típicos de la adolescencia.
La adolescencia es una etapa de cambios físicos y emocionales, a veces difíciles pero con oportunidades para que los entiendas y vivas mejor.
Si te sientes ansioso, enojado o triste, esas sensaciones probablemente tienen origen en el proceso de crecimiento que experimenta tu cuerpo debido al incremento en la producción de hormonas en la hipófisis, responsable de la diferenciación entre los órganos específicos para la reproducción femenina y masculina, así como de una diferenciación cerebral.
Si eres una chica, tu cerebro se comporta de manera cíclica, regulando el suministro de la hormona folículo estimulante y luteinizante para incidir en tus ovarios y que produzcan estrógenos y progesterona, generando todos los cambios necesarios para preparar el útero por si ocurriera la fecundación y se desarrolle el embarazo.
Si eres un varón, la producción de las mismas hormonas incide en los testículos, los cuales producen andrógenos y testosterona.
Estos cambios se manifiestan en los caracteres sexuales secundarios. Cuando tu voz empieza a cambiar, aparece la primera menstruación y se desarrollan las mamas en el caso de las mujeres; en el caso de los hombres ocurre la primera eyaculación, así como el aumento en el tamaño del pene, la aparición de bigote y barba.
Tu sexualidad
A partir de los cambios físicos, ocurre una diferenciación en la sexualidad humana que se va desarrollando durante las diferentes etapas de la vida.
“Desde que se concibe el ser humano mantiene una sexualidad definida, la cual también se irá construyendo social y culturalmente. Como hombres y mujeres, a todos nos toca cumplir un papel de género lo que nos da una identidad sexual a nivel social e individual”, explica la maestra Ofelia Reyes Nicolat, del Programa de Sexualidad Humana (PROSEXHUM) en la Facultad de Psicología de la UNAM.
Los cambios que experimentas en el desarrollo de tu sexualidad implican la concepción de una imagen corporal, por la que en la etapa de la adolescencia puedes sufrir una especie de duelo ante la reapropiación de tu cuerpo.
Por tanto, su cuidado debe ser una prioridad en esta etapa de reconocimiento y aceptación mediante la protección contra daños físicos y el mantenimiento de una higiene sexual adecuada
Después de cumplir los 20 se consolida el autoconcepto, autoimagen y expectativas personales en un futuro. Si se encuentra a una persona que coincida en estos aspectos, pueden tomar la decisión de continuar una vida juntos.
“Ambos sexos somos sujetos dentro de esta diferencia fisiológica. Tenemos los mismos padecimientos y debemos tener los mismos cuidados, las mismas responsabilidades y las mismos derechos”, menciona la especialista.
El cuidado a tu cuerpo implica un sentido de respeto individual y social ante la salud física y emocional. Por ello, desde niños debemos tener la información necesaria para conocer nuestra sexualidad así como la sexualidad de los demás.
La ruptura de la autoimagen sucede si por ejemplo se sufre un embarazo no deseado o ETS, que por la falta de precauciones resulta en una ruptura de la valoración personal y las expectativas a futuro, ocasionando frustración, culpa y depresión.
“Es importante que la educación sexual sea certera, incluyente e integral, sin discriminar y excluir por las diferencias del género”, recomendó la maestra Reyes Nicolat.
Tu forma de ser y de pensar, cambian también
Durante este proceso de cambio puedes experimentar depresión, sensación o búsqueda de soledad e independencia, algo que tu familia debe entender para buscar la mejor manera de apoyarte. Por eso, lo ideal sería que se acerquen y dialoguen sobre lo que les preocupa a ellos y a ti.
“La educación democrática dentro de la familia ayuda a tener un equilibrio en la libertad de autoconocimiento y en la propia valoración ante presiones externas como la ingesta de alcohol, drogas o mantener relaciones sexuales”, comenta la especialista.
Con este tipo de acciones, se fomenta la discusión sana donde tienes oportunidad de defender tu punto de vista, lo que te ayuda a construir tu propia ideología, desarrollar tu seguridad y autoestima. Así tendrás el conocimiento necesario y una guía adecuada para la toma de decisiones de autocuidado.
El Programa de Sexualidad Humana de la Facultad de Psicología organiza talleres y actividades sobre autocuidado y otros temas de autoconocimiento. Pregunta por ellos en: PROSEXHUM.
Por S. Itazami Sandoval.
Sitio Fuente: Ciencia UNAM