Así es el Dolmen de la Bruja, el legendario monumento megalítico del País Vasco

HISTORIA.-

El mundo está lleno de lugares enigmáticos y legendarios. Al sur del País Vasco se encuentra el Dolmen de la Bruja, un mágico monumento funerario.

Dolmen Chabola de la Hechicera, en Elvillar, Alava, País Vasco / Getty Images.

El Dolmen de la Chabola de La Hechicera o Dolmen de la Bruja es un sitio de fiesta, de aquelarre. Datado de hace aproximadamente 5,000 años, este lugar fue construido a finales del Neolítico y entre sus piedras conserva algunas de las tradiciones de Euskadi más emblemáticas.

Enigmático desde el nombre, el Dolmen de la Bruja (Sorginaren Txabola en euskera) ha recibido por milenios los restos humanos de las personas de la región y ha sido el escenario para las costumbres funerarias que acompañan a un entierro. De acuerdo con la evidencia arqueológica, fueron más de una las comunidades que vinieron al sitio a dejar a sus muertos. Por ello, las poblaciones cercanas encuentran en el Dolmen un peculiar misticismo.

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La historia del Sorginaren Txabola.

El monumento fue descubierto en 1935 y desde entonces se ha estudiado como parte del  Conjunto Monumental Dólmenes de las tierras bajas del Territorio Histórico de Álava.
Entre los objetos que se encontraron en el lugar, destacan hachas, objetos personales, ofrendas y ajuares funerarios con joyas, vasijas y armas. Además de su histórica presencia, es parte de los Bienes de Interés Cultural y Patrimonio Histórico de España.

Su nombre viene de una leyenda popular, pues según la gente de los alrededores, durante la noche de San Juan se escuchaban cantos y música que provenían del Dolmen pero no se veía que nadie estuviera si quiera cerca del monumento. Las personas de Elvillar, la localidad más cercana, también cuentan que quien se atreva a acercarse al supuesto hogar de la bruja durante los cantos, será transformado en piedra.

El Akelarrre.

Con bruja o sin bruja, de lo que si era casa el Dolmen hasta hace algunos años era de un Akelarre. Lejos de las leyendas que contiene la palabra, en el caso de los pobladores de Elvillar se trataba de una fiesta patronal en honor a Nuestra Señora de la Asunción y de San Roque. Dicha celebración se llevaba a cabo del 14 al 15 de agosto. En ellas hay baile e incluso la representación de un aquelarre, con brujas iniciando los festejos.

Por: Lydia Leija.

Sitio Fuente: National Geographic en Español