¿Sabes cómo acceder a una práctica profesional?

ORIENTACIÓN LABORAL.-

Mucha gente espera que su búsqueda de trabajo comience y termine en la empresa para la que ya está realizando una prácticas. A veces sucede, pero es importante que la empresa tenga un programa serio de prácticas diseñado para capacitar internamente a sus futuros empleados. El practicante, o becario, debe tener la oportunidad de lucir sus cualidades.

Cruzar unas prácticas no es garantía de empleo, pero no dejan de ser horas muy útiles para ganar una experiencia profesional que será muy valorada en la futura búsqueda de trabajo. De hecho, contar con una experiencia laboral relevante es tan valioso como los resultados académicos cuando se trata de construir una carrera exitosa. Por tanto, las prácticas se han convertido en una forma muy efectiva para destacar entre los reclutadores.

En los EE.UU., un informe de la Asociación Nacional de Universidades y Empleadores asegura que el 57,3 % de los estudiantes en prácticas recibieron al menos una oferta de trabajo en comparación con el 43,7 % de aquellos sin experiencia de este tipo.

Las principales ventajas de las prácticas profesionales son la posibilidad de conocer de cerca los aspectos positivos y negativos de un determinado trabajo. Y de entrar en contacto con empresas interesadas en contratar nuevo personal. En este sentido, hay que asegurarse que la compañía elegida, o que ha tocado, se tome en serio este mecanismo. Con demasiada frecuencia, de hecho, las organizaciones buscan becarios solamente para ahorrar dinero y no logran explotar al máximo su potencial.

Tipos de prácticas.

Las prácticas son el fruto de un acuerdo entre tres partes: organismo de promoción, empresa y becario. El promotor asegura que todo proceda de acuerdo a lo originalmente reglamentado a través de un convenio con la empresa. Su fin último es la formación, inserción o reinserción en el mundo laboral de quienes participan.

Por lo general, se suele distinguir las prácticas en tres tipos:

- Prácticas curriculares. Son parte de los planes de estudio de los estudiantes matriculados en escuelas secundarias o en una universidad. La participación reconoce un determinado número de créditos útiles para la obtención del título.
- Prácticas extracurriculares. Para la orientación de jóvenes titulados o licenciados, o para la reinserción en el mundo laboral de personas desempleadas, en paro, ERTE o mecanismos equivalentes.
- Prácticas profesionales (pasantías). Se realizan después de obtener un título académico (grado, máster o doctorado) y son necesarias para el ejercicio de ciertas profesiones. Por ejemplo, ingenieros, médicos o abogados.

Las prácticas curriculares y las profesionales, por lo general dependen del instituto de formación, la Universidad u otro organismo que organiza, por ejemplo, un máster privado. El centro estipula convenios con diversas empresas y el lugar de destino del candidato suele ser el resultado de un acuerdo realizado con sus profesores, en función de las perspectivas ofrecidas por la empresa y las potencialidades del candidato.

En cuanto a las prácticas extracurriculares, el promotor puede ser una Agencia Laboral acreditada que opere a nivel regional o nacional, así como directamente un organismo público. En términos concretos, se trata de una formación de campo, práctica y adecuada para una posible inserción en la empresa donde se desarrolla o en otras similares que necesiten contratar personal.

Cómo funcionan las prácticas.

Las normas que rigen la estructura, duración y la posible remuneración de las prácticas varían de un país a otro. En algunos hay una retribución mínima obligatoria, en otros, sin embargo, el servicio se presta de forma gratuita. Esto sucede, sobre todo, para las prácticas curriculares, que suelen ser breves, por ejemplo de tres meses, y cuyo objetivo primario es obtener los créditos de formación necesarios para completar el curso de estudio. No hay un contrato de trabajo, sino un convenio entre empresa y Universidad.

Por otro lado, las prácticas extracurriculares y profesionales suelen ser más largas y pueden prever una mínima retribución.

Buscar unas prácticas.

Para las prácticas profesionales extracurriculares, el candidato debe buscar proactivamente entre las numerosas ofertas publicadas por los portales especializados o sitios oficiales de las administraciones públicas. Para apuntarse es necesario cumplir con algunos requisitos establecidos y publicados en la convocatoria. Por ejemplo, encontrarse todavía en el plazo consentido para estipular un convenio con una institución educativa (normalmente es posible dentro de un límite máximo de algunos meses desde la obtención de un grado o máster) o estar en condición demostrable de desempleo.

Sin duda acceder a unas prácticas profesionales puede representar una oportunidad importante para entrar, o reingresar, en el mundo laboral, pero la elección debe hacerse con cuidado, seleccionando las mejores opciones como las que se encuentran en el portal de Universia.

Sitio Fuente: Universia México