Radiografía de… Jarabe Karo Bebé

CUIDADO DE LA SALUD / ALIMENTACIÓN. Contraindicado para bebés.

-- Su primer ingrediente es glucosa de maíz.
- Contiene jarabe de maíz de alta fructosa, ingrediente contraindicado para bebés.
- El producto se promociona para bebés, cuando no es adecuado para el consumo de infantes.

Jarabe de maíz, Karo Bebé (porción de 15 gramos = 1 cucharada).

Azúcares:

Cada porción de 15 gramos (g) contiene 10.8 g de azúcares, lo que equivale a 2 cucharadas cafeteras.

El primer ingrediente es glucosa de maíz y el segundo es jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF), ninguno es recomendado para consumo en menores de 2 años, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), debido a que la recomendación es no proporcionar azúcares añadidos a infantes menores de 2 años.

El JMAF ha demostrado ser altamente dañino, causante de una diversidad de trastornos metabólicos (grasa elevada en sangre, ácido úrico elevado, presión alta, colesterol elevado, entre otros) así como estar asociado a padecimientos como obesidad y diabetes mellitus tipo 2.

Sodio:

Contiene 12.2 miligramos (mg) de sodio por porción, lo que no es significativo.

Energía:

Cada porción aporta 45 calorías.

De acuerdo con las recomendaciones de ingestión de nutrimentos para infantes, que puede oscilar entre 1,000 y 1,400 calorías diarias, una porción de jarabe de maíz cubre del 3.2% al 4.5% del consumo calórico total en un día.

Este tipo de productos se utiliza para endulzar alimentos o accesorios utilizados por los bebés, como chupones o biberones. Sin embargo, no se recomienda que las calorías provengan de azúcares, mucho menos de fuentes como el JMAF.

Es importante que el aporte calórico para los infantes provenga principalmente de la leche materna y en segundo lugar de una alimentación complementaria, como es una dieta rica en nutrientes basada en alimentos naturales.

Recordemos que justo en esta etapa, los infantes están reconociendo sabores y texturas de los alimentos, motivo por el cual no se debe añadir jarabes o azúcares libres a su alimentación, ya que estos moldean su preferencias alimentarias y habitúan su paladar al sabor dulce.

Ingredientes:

Glucosa de maíz, jarabe de maíz de alta fructosa, agua, sal yodada, vitaminas (B1 y B6), saborizante natural y ácido cítrico.

Es preocupante que un producto para bebés contenga jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF), cuando se ha demostrado que este ingrediente es altamente nocivo para el metabolismo.

Un bebé no debe ser expuesto a ingredientes como el que se menciona.

Etiquetado:

Por ser un producto para bebés, de acuerdo con la NOM-051 sobre etiquetado frontal de advertencia, no es considerado dentro de la categoría de alimentos que deban portar sellos de advertencia, sin embargo el producto contiene una alta cantidad de azúcares.

El empaque presenta el nombre del producto en el centro, junto con la cara de un bebé, por lo que se trata de un producto claramente dirigido a esta población. Esto es inapropiado, debido a que el producto contiene jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF), un ingrediente que no es adecuado para el consumo en infantes.

En un reporte realizado por la Profeco en noviembre del año pasado, publicado en su Revista del Consumidor, se establece que el jarabe Karo Bebé representa un peligro para la salud de los bebés.

Estos reportes ayudan a los consumidores a tener una mayor orientación, sin embargo esta información no puede competir con la cantidad de engaños publicitarios y productos que existen en el mercado y que afectan la salud de la población infantil.

Además, al incluir la cara de un bebé, el producto infringe el Código Internacional de Comercialización para Sucedáneos de la Leche Materna, en donde claramente se establece que no se pueden utilizar imágenes de infantes para publicitar cualquier producto que pudiese interferir con la lactancia materna.

Es importante que los etiquetados en los productos, especialmente aquellos para infantes, realmente orienten a los consumidores con respecto a su contenido, ya que mamás y papás podrían creer que es un producto apropiado para sus hijos, cuando en realidad corren el riesgo de exponerlos, mediante su consumo, a impactos negativos en la formación de hábitos.

Nuestra valoración:

Contraindicado para bebés.

Te proponemos:

Leche materna.

Sitio Fuente: El Poder del Consumidor