Nuevas señales del subsuelo de Etiopía delatadoras de que allí se ha comenzado a formar un nuevo océano

CIENCIAS DE LA TIERRA / GEOLOGÍA.-

Los continentes de la Tierra no siempre han sido los mismos, ni lo serán en el futuro. Y lo mismo ocurre con los océanos.

La transformación de los continentes por la tectónica de placas va acompañada de una reorganización de las masas de agua entre ellos. Pero todos estos procesos son tan tremendamente lentos que resulta difícil detectarlos. Un nuevo estudio revela señales del subsuelo de Etiopía que respaldan la sospecha de que allí se ha comenzado a formar un nuevo océano.

Flujos de lava expulsada por el volcán Erta Ale en Afar, Etiopía. Foto: Derek Keir / University of Southampton / University of Florence.

El estudio es obra de un equipo internacional encabezado por Emma Watts, de la Universidad de Southampton, que ahora está en la de Swansea, ambas en el Reino Unido.

Se sospecha desde hace tiempo que bajo la región se encuentra un afloramiento o penacho de materia muy caliente del manto, que contribuye a impulsar la remodelación de la corteza y el nacimiento de una futura cuenca oceánica. Sin embargo, hasta ahora se sabía muy poco sobre la estructura de este afloramiento y sobre su comportamiento bajo las placas.

El análisis de las observaciones realizadas en el nuevo estudio confirma que la región de Afar, en Etiopía, está sobre un penacho de materia muy caliente procedente del manto, y revela que ese penacho ejecuta movimientos verticales pulsantes, como latidos de corazón.

Esas pulsaciones o latidos que empujan hacia arriba la roca fundida del manto terrestre están desgarrando gradualmente el continente en lo que será el primer paso para la formación de un nuevo océano. Buena parte de la naciente grieta se halla en dicha región etíope.

El flujo ascendente de material caliente procedente del manto profundo está fuertemente influenciado por las placas tectónicas (las enormes losas sólidas de la corteza terrestre) que se mueven sobre él.

A lo largo de millones de años, cuando las placas tectónicas se separan en zonas de grieta como Afar, se estiran y adelgazan, casi como plastilina blanda, hasta que se rompen. Esta ruptura marca el nacimiento de una nueva cuenca oceánica.

Geológicamente, la región de Afar es un lugar muy especial: es el único sitio de la Tierra donde convergen tres grietas tectónicas: la grieta principal de Etiopía, la grieta del Mar Rojo y la grieta del golfo de Adén.

El estudio se titula “Mantle upwelling at Afar triple junction shaped by overriding plate dynamics”. Y se ha publicado en la revista académica Nature Geoscience.

Por: Redacción.

Sitio Fuente: NCYT de Amazings