¿Hemos alcanzado ya el pico de la producción de petróleo global?
CIENCIAS DE LA VIDA / ECOLOGÍA.
El “pico del petróleo” (o peak oil) es el momento en que la producción mundial de crudo alcanza su máxima capacidad y luego inicia una fase irreversible de descenso.
Si bien el concepto se popularizó con la teoría de M. King Hubbert en los años 50, la pregunta hoy es: ¿estamos en ese momento decisivo o aún hay margen para la expansión?
1. Distinción crítica: oferta vs demanda.
En los últimos años, gran parte del debate ha migrado del pico de oferta al pico de demanda. La revolución del fracking en EE. UU. demostró que la oferta puede mantenerse alta gracias a tecnologías innovadoras. Sin embargo, ahora es la demanda la que podría estabilizarse o disminuir, debido a factores como la eficiencia, el auge de los vehículos eléctricos y políticas climáticas.
2. ¿Qué dicen los grandes organismos?
- La AIE (2023) anticipa el pico de demanda hacia 2029, en torno a 102 M barriles/día.
- BP estima un tope entre 2025 y 2030, también cerca de los 102 M b/d.
- OPEC y la EIA proyectan un crecimiento continuo hasta 2045–2050, estimando picos mucho más tardíos. Esto evidencia la gran incertidumbre, condicionada por variables económicas, tecnológicas y políticas.
3. Señales actuales: EE. UU. y el shale oil.
EE. UU., gracias al fracking, marcó un récord de 20,1 M b/d en 2024, equiparándose a Arabia Saudí y Rusia. Pero ahora se detecta una saturación en formaciones como el Permian y Bakken, con productividad en declive, aumento de costes por barril y menor gasto en exploración. La EIA anticipa que la producción estadounidense alcanzará su máximo en el segundo trimestre de 2025, con una suave caída posterior.
4. ¿Y la producción global?
El petróleo convencional habría tocado techo en 2006, según la AIE, o incluso en 2010 según otros análisis, aunque tras esa fecha la inclusión de fuentes no convencionales ha suavizado cualquier descenso. Pero los descubrimientos de nuevos yacimientos han sido cada vez menores, lo que hace insostenible mantener niveles de extracción elevados por más tiempo.
5. Conclusión: nos acercamos al pico… pero ¿ya lo tocamos?.
- La oferta sigue siendo flexible gracias a tecnología, aunque con signos claros de saturación en EE. UU.
- La demanda es hoy el factor más determinante: varias agencias coinciden en que alcanzará un máximo entre 2025 y 2030.
- Incluso si dejamos atrás el pico de demanda, la producción podría mantener niveles elevados durante décadas, especialmente en sectores como aviación, petroleoquímicos y mercados en desarrollo.
En resumen, es probable que ya estemos en un plateau o meseta de producción, con una estabilización entre 100 y 105 M b/d en los próximos años. Lo crucial no será solo si hemos llegado al pico, sino cómo gestionamos la transición energética: inversión en renovables, eficiencia y alternativas será clave para mitigar el impacto socioeconómico.
6. Recomendaciones para el lector.
- Si eres inversor: vigila las curvas de demanda y la evolución del shale americano.
- Si trabajas en políticas energéticas: establece estrategias para una transición ordenada de hidrocarburos a energías limpias.
- Si eres ciudadano preocupado por la sostenibilidad: apoye medidas que faciliten el abandono progresivo de los combustibles fósiles.
Sitio Fuente: NCYT de Amazings