La innovación, un motor para impulsar las soluciones sostenibles

INNOVACIÓN. Tiempo de lectura: 10 minutos.-

El compromiso con la sostenibilidad está transformando los negocios. No se trata solo de maximizar beneficios, sino de generar un impacto positivo en el entorno y en futuras generaciones. En este camino, como demuestra el Grupo UNACEM, la innovación es clave para impulsar prácticas sostenibles.

Por Kurt Uzategui, Gerente General y Tribe Leader de DIGICEM del Grupo UNACEM.

La innovación nos permite cerrar brechas e impulsar agendas sostenibles retadoras, por lo tanto es una pieza clave para poder cumplir con la Declaración de Sostenibilidad del Grupo que nos impulsa a alcanzar la neutralidad de CO2 en 2050. El impacto que buscamos en el mundo exige ir más allá de las prácticas tradicionales. Es allí donde la innovación y la tecnología que la acompaña ganan un papel preponderante y transversal.-

La innovación nos ha permitido, como grupo industrial peruano con más de 100 años de legado, diversificarnos y consolidarnos como actores relevantes en diversas industrias, como cemento, concreto y energía, en Estados Unidos, Ecuador, Chile y Colombia. Por ello, la innovación debe ser la herramienta clave para enfrentar los desafíos empresariales actuales como los riesgos suscitados por el cambio climático y transformarlos en oportunidades.

Con la innovación, buscamos contar con un modelo que promueva la formulación de ideas en todos los niveles de la organización, centralizando su desarrollo y escalando su implementación. Con tecnología, por otro lado, apuntamos a implementar sistemas integrados de gestión de información de clase mundial y capacidades digitales de industria 4.0 centradas en el cliente, que adopten nuevas maneras de trabajar y abracen la inteligencia artificial.

La innovación en procesos necesita una estructura organizacional que la guíe y motive, si realmente queremos que se adopte. Recientemente, hemos impulsado el desarrollo de un Centro de Excelencia que está enfocado en promover nuevas tecnologías industriales y de energía, alineado a la estrategia del Grupo. El uso de estos centros de generación de conocimiento y mejores prácticas permite a las empresas escalar soluciones con eficiencia y aprender de manera permanente de los aciertos y errores en los esfuerzos de innovación. Lo que funciona en una unidad es rápidamente replicada en otras, lo cual nos permite ver el impacto directo a una mayor velocidad.

No debemos perder de vista que el modelo de innovación industrial que venimos promoviendo está centrado en las personas. Sin la adopción por parte de nuestros equipos de capacidades digitales y de una cultura que promueva la innovación y la toma de riesgos, la tarea de transformación se hace titánica.

Innovación en todo lo que hacemos: productos, procesos e impacto social.

La lista de cómo venimos implementado el pensamiento innovador y la tecnología en nuestra cadena de valor se refleja en acciones de distinta escala e impacto pero que, agregadas, empiezan a configurar mejoras significativas en la manera en la que gestionamos los negocios. Por ejemplo, la integración tecnológica entre todas las unidades de negocio nos ha permitido avanzar con mayor velocidad en la toma de decisiones.

Asimismo, la automatización de diversos procesos en las plantas, con el objetivo de crear operaciones autónomas y eficientes tanto en cementos como en prefabricados de concreto, nos ha demostrado los beneficios financieros de abrazar el cambio. Detrás de ello existe toda una inversión tecnológica importante que permite soluciones rápidas y eficientes para los proyectos de construcción, a través de la robótica y con programas que impulsan a nuestros equipos a resolver desafíos.

En cuanto a productos, implementamos proyectos innovadores que buscan comunicar y consolidar los avances en tecnología e innovación. En sostenibilidad, desarrollamos cementos que tengan una menor huella de carbono a través de la reducción del factor, sustituyéndolo por materiales adicionados, sin afectar la calidad del producto. Asimismo, utilizamos combustibles alternativos limpios para disminuir el uso de combustibles fósiles, como por ejemplo biomasa proveniente de residuos forestales, aceites reutilizados, entre otros. También invertimos en la innovación y desarrollo de nuevas tecnologías para reducir el CO2.

Nuestra apuesta también se dirige a innovación en modelos de negocio digitales disruptivos. Desde DIGICEM, unidad de negocio del Grupo UNACEM, nuestro proyecto más grande es Progresol Plus, un e-commerce/marketplace B2B que busca revolucionar la experiencia de servicio y bienestar del pequeño ferretero tradicional peruano. El propósito es conectar y hacer sostenible este canal ferretero que cuenta con un nivel de transaccionalidad básico y no digital.

Progresol Plus, como e-commerce/marketplace B2B, apunta a revolucionar la manera en que las ferreterías se abastecen de productos de construcción. Si bien aún estamos en la fase de desarrollo, contamos ya con más de 1,500 ferreteros afiliados a la plataforma en ciudades como Lima y Ica, y nos proyectamos a crecer significativamente en el futuro.

Vemos a DIGICEM como un hub de innovación para modelos de negocios disruptivos del grupo. Un corporate venture building (startup corporativa), que acelera el proceso de transformación digital del actual go-to-market de los materiales de construcción, buscando mejorar la experiencia de los clientes en los canales de distribución más importantes.

El impacto de interiorizar una filosofía que abrace la innovación se ve en ejemplos concretos más allá de DIGICEM en el Grupo UNACEM. Por ejemplo, en la de negocios de concreto, UNICON, hemos desarrollado una programación de pedidos en tiempo real. Se ha logrado reducir el tiempo de confirmación y programación de pedidos en Perú de 24 horas a 5 minutos y habilitar la programación en línea. Eso es un cambio fundamental en cómo operamos.

Hemos innovado también en la unidad de generación y comercialización eléctrica, Celepsa, con la introducción de la Etiqueta Triple C para fomentar el compromiso Carbono negativo, por ejemplo. Esta etiqueta brinda a sus clientes la certeza de que la energía que adquieren es de origen 100% de fuente renovable. Es un ejemplo de innovación no intensiva en inversión tecnológica, pero que atiende una preocupación real de sus clientes.

La unidad de negocio cementero también ha llevado a la práctica la implementación de soluciones tecnológicas con alto impacto. UNACEM Perú, por ejemplo, implementó tableros de control desarrollados con software de inteligencia de negocios aplicativos de chat y georreferenciación para el seguimiento de las ventas por canal, producto, zona, distribuidor, unidad de medida, planta y cliente.

En esta misma unidad de negocio hemos experimentado con otro frente dentro del ecosistema de innovación que estamos trabajando: innovación en la forma en que impulsamos nuestras marcas. En el Perú, contamos con una lovemark en la categoría de cemento, Cemento Sol. En este año se ha logrado un caso de éxito que tienen en la innovación con impacto social como su eje central.

La campaña “Veredas que Guían” de Cemento Sol transformó varias veredas de un distrito de la ciudad de Lima, Miraflores, en espacios más inclusivos mediante la instalación de un innovador sistema de baldosas podotáctiles que facilita la orientación autónoma de personas con discapacidad visual y les permite ubicar servicios básicos como farmacias, bancos, restaurantes, centros de salud, entre otros.

Este esfuerzo fue reconocido en el festival internacional de creatividad Cannes Lion con ocho leones, incluyendo el Grand Prix por su significativo impacto con la inclusión social y el desarrollo comunitario, convirtiéndo se en la marca peruana con mayor cantidad de reconocimientos en la historia de este importante festival.

Esta innovación es para nosotros un estímulo para seguir explorando distintas maneras de hacer las cosas. Hemos puesto a disposición de empresas, autoridades y público en general la patente del sistema detrás de “Veredas que Guían” de tal manera de que pueda ser replicada en beneficio de la comunidad.

La innovación requiere un cambio cultural.

Toda innovación tiene que entender el contexto en el que las compañías se mueven. Por ejemplo, en el caso del e-commerce/marketplace que venimos impulsando y detallamos líneas arriba, Progresol Plus, hemos identificado un problema de relevancia: el alto nivel de informalidad en este mercado ferretero local. Esto supone nuevos retos para la implementación de la propuesta de innovación digital en términos de relacionamiento con stakeholders y temas fundamentales como cobranzas, impuestos, despacho de productos, entre otros. Todo proyecto de innovación necesita entender cómo opera la cadena de valor, cuáles son las expectativas de cada actor y la manera en cómo se relacionan.

El cambio cultural que se necesita debe partir desde el interior de las organizaciones para estar preparados ante lo que el entorno -la alta informalidad en nuestro ejemplo anterior- nos depara. Así, el fortalecimiento de capacidades de transformación digital e innovación en nuestros equipos de trabajo debe ser una prioridad. Por ello, los esfuerzos de capacitación son fundamentales.

Un aprendizaje importante que venimos impulsando en particular en DIGICEM, la división que lidero, es mantener viva la filosofía de startup corporativa. Es necesario imprimir en los equipos una visión positiva sobre la transformación a toda escala, en donde hablar de disrupción y agilidad sea la normalidad. Solo así se podrá lograr un clima organizacional de excelencia para los nuevos tiempos.

En esta división, venimos impulsando una cultura basada en un modelo de trabajo flexible, basado en la confianza y en la entrega de valor de los equipos. Asimismo, hemos cultivado espacios de retroalimentación constante, tanto informal como formal, y revisiones semanales o quincenales, donde los equipos exponen sus avances alineados con los objetivos de la empresa. No podemos dejar de lado el establecimiento de Objectives and Key Results (OKRs)ambiciosos, revisados y ajustados cada tres meses para asegurar el crecimiento continuo y la motivación de los equipos.

En conclusión, necesitamos tener un sistema de gestión de personas que adopte la innovación y promueva la experimentación. De esta manera, podremos otorgar mayor valor a nuestros clientes y hacer más eficientes nuestros procesos.

Es cierto que la innovación debe estar centrada en el cliente, pero debe empezar con nuestra propia gente. Allí está el gran reto de quienes lideramos organizaciones y vemos en la innovación un motor real de soluciones a los distintos problemas que afrontamos.

Por: Redacción.

Sitio Fuente: MIT Technology Review