Big data, cardiología… y éxito deportivo
CIENCIAS DE LA COMPUTACIÓN / CIENCIAS DE LA SALUD.
La monitorización de un corazón aporta información capaz de mejorar el rendimiento físico de un deportista, pero también puede ser fundamental para detectar de forma temprana posibles enfermedades cardiovasculares. Manuel Marina Breysse, Cardiólogo, CEO y cofundador de IDOVEN, startup en la que invierte Iker Casillas desde que sufrió un infarto en 2019, nos cuenta cómo convierten los latidos del corazón en información médica relevante gracias a algoritmos de inteligencia artificial en la nube y a tecnología wereable.
Hace pocas semanas se vivieron momentos de tensión en la Eurocopa cuando Eriksen, el futbolista danés del Inter de Milán, cayó desplomado en el campo durante el encuentro Dinamarca-Finlandia. El jugador había sufrido una parada cardiorrespiratoria y tuvo que ser reanimado mientras el estadio contenía la respiración ante la gravedad de lo ocurrido.
Unos años antes Iker Casillas, uno de los mejores porteros del mundo, también sufrió una crisis cardiaca. El guardameta resistió un infarto que seguramente se podría haber evitado si se hubiera realizado un seguimiento cardiovascular adecuado. Por ello, desde ese momento, Casillas se convirtió en inversor de Idoven, startup especializada en la monitorización del corazón y el tratamiento de datos con Inteligencia Artificial. En sus apariciones con Idoven, el cancerbero afirma: “Cuando te ocurre algo así, te hace abrir los ojos y valorar realmente la importancia que tiene cuidar y analizar tu corazón con regularidad”.
La cardiología en remoto pieza clave en los entrenamientos y la salud de los deportistas.
Los avances de los últimos años en Cloud Computing y Big Data unidos a las posibilidades que ofrece el análisis avanzado de datos gracias a algoritmos de inteligencia artificial hacen posible el seguimiento cardiológico en remoto. Esto significa que se pueden recopilar grandes cantidades de datos de pacientes para luego analizarlos y sacar conclusiones sin que tengan que pisar un hospital.
Marina comenta que para ellos es más interesante enviar dispositivos de medición a domicilio para monitorizar a sus usuarios que citarlos en la clínica continuamente. No solo por una cuestión de comodidad para el usuario sino también de eficacia en las mediciones. De esta manera pueden obtener datos de un mayor rango de tiempo o de momentos puntuales que de otra manera sería muy complicado, por ejemplo, un paciente puede estar monitorizado durante varios días con un dispositivo portátil o un deportista puede ser medido antes, durante y después de su entrenamiento.
Los datos recogidos por los sensores se envían a la nube y ahí el equipo de cardiólogos puede consultar y analizar electrocardiogramas y holters en tiempo real.
Big data, deporte… y salud.
Los datos cardiacos son un aliado para maximizar el rendimiento de los deportistas. Para conseguirlos se monitoriza el corazón de los atletas con sensores especializados durante varias jornadas. Una vez recopilados estos ítems se procesa la información atendiendo a métricas habituales combinadas con otras nuevas fruto del I+D biomédico. Por último, se extraen conclusiones que se transforman en recomendaciones deportivas enfocadas a aportar valor a los entrenadores.
Pero estas mediciones no solo aportan valor para mejorar la capacidad física de los pacientes, sino que también arrojan información sobre el estado de salud del deportista y la resistencia que ofrece su corazón al esfuerzo del entrenamiento. La clave para obtener estos datos que pueden salvar vidas evitando paradas cardiacas, infartos u otras complicaciones cardiacas es medir de forma continuada durante el mayor tiempo posible. Para Medina el valor diferencial no está solo en la recopilación exhaustiva de datos sino en el análisis, por ello comenta que se ponen a su servicio capacidades de cómputo extraordinarias. Un dato que ilustra el esfuerzo depositado en este ámbito es la potencia del software empleado que utiliza hasta 1600 GB de RAM para un solo paciente.
Empleo en Big Data especializado en salud deportiva.
Trabajar en una empresa como Idoven implica tener conocimientos tecnológicos y sanitarios, pero también estar especializado en medicina de la actividad física si lo que se desea es trabajar con la élite del deporte. Conseguir profesionales con este nivel de formación no es fácil si además se suma una variante más: que quienes desarrollen su carrera en este campo sean capaces de hablar un lenguaje adecuado a su interlocutor. En ocasiones utilizar excesivos tecnicismos puede ser contraproducente ya que quien recibe la información no puede asimilar los resultados obtenidos. La clave es priorizar los datos con valor clínico o de rendimiento, exponerlos de manera sencilla y hacerlos accesibles para el usuario que los va a manejar.
Únicamente quienes tienen esta formación multidisciplinar son capaces de aportar valor en un campo tan especializado y con tantas oportunidades laborales. Marina destaca: la salud se está digitalizando y comienza a requerir perfiles de este tipo. Ingenieros o programadores con conocimientos médicos o profesionales sanitaros con conocimientos tecnológicos son el futuro del sistema sanitario.
Si este artículo te ha resultado interesante descubre más sobre Big data y deporte en la semana Datos de competición.
Sitio Fuente: Universia México