Pierre-Joseph Macquer: el químico entre ciencia, industria y arte en la Ilustración

HISTORIA DE LA CIENCIA.-

Pierre-Joseph Macquer (1718–1784) fue una figura clave en la química del siglo XVIII, uniendo los saberes de la ciencia, la medicina y la industria en plena Ilustración. Su vida profesional refleja la transición de la alquimia a una química moderna, antes de la revolución lavoisieriana, y subraya la importancia de la experimentación, la sistematización del conocimiento y la aplicación práctica.

Foto: Wikimedia Commons.

Orígenes y formación.

Nacido en París el 9 de octubre de 1718, Macquer provenía de una familia con raíces posiblemente escocesas o irlandesas. Estudió medicina en la Universidad de París, graduándose hacia 1742, pero pronto su interés se centró en la química. Fue discípulo del químico Guillaume-François Rouelle en el Jardín Real de Plantas Medicinales (“Jardin du Roi”), donde comenzó a desarrollar su propia actividad experimental.

En 1745 fue elegido miembro de la Académie des Sciences, lo que marcó el reconocimiento temprano de su obra química.

Contribuciones científicas.

Macquer combinó su formación médica con la experimentación química, logrando avances en varias áreas:

- Teoría química: En 1749 publicó su Éléments de Chymie Théorique, seguido en 1751 por Éléments de Chymie Pratique. En estas obras, sistematizó conceptos químicos y enfatizó que la química debía basarse en hechos experimentales, más que en especulaciones teóricas excesivas.

- Diccionario de Química: Probablemente su obra más duradera fue el Dictionnaire de Chymie, cuya primera edición apareció en 1766 (y una ampliada en 1778). En su “Discours préliminaire” al diccionario, Macquer recorre la historia de la química desde la alquimia hasta su presente ilustrado, defendiendo la sistematización del saber.

- Investigaciones prácticas:

- Estudió el arsénico, demostrando su naturaleza metálica y desarrollando algunos de sus compuestos.

- Analizó el “azul de Prusia” (pigmento azul de ferro-cianuro): en 1752 mostró que puede descomponerse con soluciones alcalinas, obteniendo una mezcla de hidróxido férrico sólido y una solución acuosa.

- Colaboró con Antoine Baumé en estudios sobre la combustión del hidrógeno (“aire inflamable”), llegando a observar, ya en 1776, que producía agua.

- También participó en experimentos sobre la combustión del diamante y sobre la oxidación de metales como estaño y plata.

- En química orgánica, investigó la composición de la leche y fue pionero en el uso de disolventes para el caucho, un material recién descubierto provenientes de América.

Aplicaciones industriales: porcelana y teñido.

Una de las facetas más sobresalientes de Macquer fue su capacidad para trasladar la teoría a aplicaciones tangibles:

- En 1768 participó en la Manufactura de Sèvres, contribuyendo a la introducción de la porcelana de Saxe en Francia.

- Desarrolló un método para tintar seda: propuso una teoría de los mordientes ya en 1775, mostrando su dominio de la química aplicada en el teñido.

- Según estudios modernos, actuó como puente entre los artesanos y la ciencia: fue “comisario de teñido” desde 1766 y mantuvo estrechos vínculos con inventores artesanales.

Estas actividades lo convierten en un ejemplo clásico de científico-artesano, capaz de cerrar la brecha entre la teoría académica y la manufactura práctica.

Postura teórica y enfrentamiento con la química emergente de Lavoisier.

Aunque Macquer fue profundamente experimental, mantuvo durante toda su vida una postura conservadora en ciertos aspectos teóricos:

- Fue partidario de la teoría del flogisto, la cual defendió incluso cuando las nuevas ideas de Antoine Lavoisier comenzaban a ganar terreno.

- A pesar de sus objeciones, colaboró con Lavoisier en algunos informes científicos: por ejemplo, trabajaron juntos en cuestiones relacionadas con la producción de salitre para la pólvora.

- No obstante, su fidelidad al flogisto no le impidió reconocer la utilidad de una química fiel a los datos experimentales, algo que expresaba con frecuencia en sus escritos.

Vida profesional y cargos.

- Fue profesor de química y farmacia en el Jardín Real de Plantas Medicinales en París durante más de una década.

- En 1757 se vinculó a la Academia Real de Ciencias como químico, cargo que mantuvo con distintos títulos: fue nombrado “chimiste académicien” de la manufactura de Sèvres.

- También desempeñó funciones públicas: fue censor real en el Bureau de Comercio (control industrial), informando sobre descubrimientos químicos en la industria y la medicina.

- Fue miembro de la Société Royale de Médecine, subrayando su conexión con el mundo médico.

- En 1775 fue elegido miembro de la American Philosophical Society, lo que muestra su reconocimiento más allá de Francia.

- Falleció en París el 15 de febrero de 1784.

En resumen, Pierre-Joseph Macquer no solo fue un químico teórico brillante, sino también un científico profundamente práctico que dejó su huella en la industria de su tiempo. Su legado reside tanto en los laboratorios (con sus experimentos sobre arsénico, pigmentos y combustión) como en las fábricas de porcelana y los talleres de tintorería. Fue un puente entre la ciencia académica y las aplicaciones industriales, un maestro comprometido con la enseñanza y la sistematización del conocimiento químico, y un actor clave en la transición hacia la química moderna.

Sitio Fuente: NCYT de Amazings